Qué debe llevar una crema hidratante
Cuando hablamos de hidratar la piel pensamos en agua como principal elemento. De hecho, en cosmética, si nos fijamos en las cremas hidratantes observaremos que el color que predomina en el envase es el color azul. Incluso muchas de ellas la propia crema es de color azul para dar esa sensación de frescura y confort propio del agua fresca que tomamos cuando tenemos sed.
Pero hidratar no es sinónimo solo de aportar agua en el caso de nuestra piel. Como ya hemos comentado en más de una ocasión, nuestra piel es el órgano más extenso de nuestro cuerpo y está perfectamente diseñado para que sea una barrera defensiva frente agentes externos y, al mismo tiempo, un sistema selectivo de comunicación al medio externo. Y digo selectivo, porque es un obstáculo infranqueable que evita la entrada de sustancias tóxicas y es el único vehículo que regula la entrada de determinados activos que son beneficiosos para nuestro organismo. Además de ser un buen regulador de nuestra temperatura corporal.
Pues dicho esto, creo que es importante conocer bien la estructura de la epidermis para poder entender fácilmente qué debe llevar una crema hidratante o mejor dicho qué crema es la mejor para hidratar nuestra piel.
Concretamente, voy a explicar de forma sencilla la estructura de la última capa: el estrato córneo, la capa más externa. Está compuesta por células muertas que están en constante renovación y, por esa razón, está en constante descamación, aunque nosotros, en condiciones de tener una piel sana, no nos damos cuenta. Su función principal es mantener la piel hidratada, protegernos de agentes externos dañinos y, evitar que la piel se queme por la exposición a la radiación solar.
Las células que componen esta barrera cutánea se llaman corneocitos y están dispuestos como si fueran ladrillos perfectamente alineados y cementados con una sustancia compuesta por lípidos que desempeñan una función fundamental, pues a través de ellos se consigue que determinados fármacos se puedan absorber ya que tienen la capacidad de generar unos poros denominados poros acuosos que dan acceso a la entrada selectiva de determinadas sustancias. Es como si fuera una pared de ladrillos que esta engarzada con cemento, y ambos forman una estructura compacta.
Ya con esta pequeña descripción, se puede sacar una conclusión muy simple pero no por ello menos importante. Y es que para mantener una piel hidratada, no solo hay que aportar agua sino también hay que evitar que el agua se evapore. Por tanto, debemos mantener equilibrada esta estructura formada por corneocitos y cemento lipídico.
Los lípidos que rodean a los corneocitos son ceramidas, ácidos grasos libres, colesterol, esteres de colesterol, escualeno y fosfolípidos.
Por otra parte, en esta estructura también están presentes aminoácidos, amoniaco, ácido úrico, sodio, potasio, magnesio, urea, lactatos, citratos y fosfatos. Todos estos compuestos forman lo que se denomina NMF (Factor de hidratación natural).
¿Qué pasa cuando hay un desequilibrio de alguno de estos elementos? Nuestra piel se descama más de lo normal, está roja, sensible, apagada, pica y notamos tirantez. Ahora que ya sabemos qué es la estructura de la capa más externa de la piel y habiendo entendido los factores que influyen en la hidratación es momento de contestar a la pregunta clave:
Qué tiene que tener una buena crema hidratante
Para que una crema hidrate correctamente nuestra piel, en su composición debe contener sustancias oclusivas que eviten la pérdida de agua por transpiración, sustancias capaces de captar y retener agua, sustancias que aporten agua y sustancias que formen parte del componente lipídico que constituye el cemento entre los corneocitos o que aporten emoliencia, pero sin ser oclusivos. Tratemos de explicarlo con un lenguaje menos técnico para entendernos.
Sustancias oclusivas: Se trata de compuestos grasos que además de evitar la evaporación de agua, también aportan emoliencia y confort en la piel, y que en muchas formulaciones forman parte de los excipientes del producto. Es el caso de triglicérido de cadena media, lanolina y derivados, aceite de almendra, aceite de jojoba, aceite de germen de trigo, aceite de karité, vaselina, parafina, ceramidas…
Sustancias capaces de captar agua del ambiente y retenerla: Una de la más conocida es la Urea, que formulada en concentraciones entre 0,5-10% y a ph ligeramente ácido, tiene una gran capacidad de hidratación. El ácido láctico y el ácido glicólico, además de regenerar también tienen propiedades hidratantes formulados a un ph entre 3 y 5. La gluconolactona, el pantenol, la nicotinamida, la glicerina, propilenglicol y el sorbitol. Y no podemos olvidarnos de una macromolecula que está muy de moda, el ácido hialurónico. Este compuesto es una autentica esponja, con una gran capacidad de retención de agua. Otras macromoléculas también con gran capacidad de captación de agua son los hidrolizados de colágeno, elastina y glucosaminoglicanos.
El aporte de sustancias como las ceramidas o los esteroles para contrarrestar el déficit en la estructura lipídica del cemento epidérmico, no está claramente demostrado, pero se cree que puede compensar el déficit de dichas sustancias.
Por otra parte, compuestos emolientes como el aceite de rosa mosqueta, aceite de borraja, el aceite de oliva o la vitamina F (aceite de girasol, soja, maíz y onagra) rica en linoleico, linolénico y araquidónico favorecen la retención de agua y son precursores de la síntesis de ceramidas.
¿Cómo evitar una piel deshidratada?
Por último, dar unos pequeños consejos para evitar que nuestra piel se deshidrate:
- Ducha corta frente a baño.
- Reducir el número de duchas al día.
- Temperatura del agua debe ser tibia nunca muy caliente.
- Usar productos cosméticos que hidraten nuestra piel.
- Evitar el empleo de geles. Preferentemente utilizar Syndets que no arrastren la barrera lipídica de nuestra piel.
- Importante recordaros que es fundamental mantener una piel saludable para prevenir tanto de enfermedades cutáneas como enfermedades sistémicas.
Y por último vamos a resolver una duda que muchas veces surge. Y es que ante tanta crema hidratante que puedes encontrar en el mercado también debes saber qué ingredientes no debe tener una crema hidratante. Y no es otra cosa nada mas que perfumes que puedan dar alergias. Una crema hidratante sirve para hidratar la piel, para nada más. Cualquier añadido lo único que puede provocar es que no hidrate lo suficiente o provoque otros problemas.
Muy claro!!!